… despertó cuando el aire revolvía su melena al caer
Empire State abajo. ¡Vaya susto se
llevó! Mientras veía acercarse el gris hormigón de la Quinta Avenida: se quejaba de aquel sonámbulo resbalón… ¡ahora qué por
fin tenía trabajo!
©Ainhoa Núñez Reyes